Hoy estamos celebrando el
480 cumpleaños de Suesca. Acerca de este evento no podríamos utilizar
propiamente la palabra “fundación”, puesto que cuando llegaron los conquistadores
españoles a Suesca, el 14 de marzo de 1537, ya existía un poblado indígena en
ese lugar.
En el caso de Bogotá, allí
en efecto hubo una ceremonia de fundación,
pues como dicen los historiadores, el 6 de agosto de 1538 (año y medio
después de la llegada a Suesca) se construyó en el lugar una capilla donde se
celebró la misa, y doce chozas en alegoría a los doce apóstoles, y al nuevo
poblado se le dió el nombre de “Nuestra Señora de la Esperanza”, el cual se
cambió en el proceso jurídico a Santafé de Bogotá[1].
En el caso de Suesca conservó su nombre indígena “Sue Jica” que en lenguaje
chibcha significa “roca de las aves”.
El dominico Fray Domingo de
las Casas fue el sacerdote que acompañó al conquistador Gonzalo Jiménez de
Quesada en su expedición en busca de Eldorado[2],
la cual se inició en Santa Marta en 1536, y fue él quien celebró la primera
misa en el poblado indígena de Suesca cuando llegaron el 14 de marzo de 1537.
Acerca de este hecho se dice que “fue preciso improvisar un altar en uno de los
bohíos y utilizar como ornamentos algunas mantas tejidas por los muiscas”[3].
Una semana después el
conquistador Gonzalo de Jiménez de Quesada continuó su viaje hacia el interior
del territorio que luego se convertiría en el Virreinato de la Nueva Granada luego
de que fundara a Santafe de Bogotá y se resolviera en España la disputa entre Jiménez de Quesada, Sebastián de
Belalcázar y Nicolás de Federmán por el dominio de dicho territorio. Hacia 1560, después de ser nombrado como
“Adelantado del Nuevo Reino de Granada” por el Rey de España, Jiménez de
Quesada decidió trasladarse a Suesca donde vivió por varios años, y donde
escribió Ratos de Suesca, un
compendio en el que narraba sus descubrimientos y conquistas pero que luego
desapareció.
O sea que lo que se
conmemora hoy es en realidad la llegada de los conquistadores a esta población
indígena que ya existía: Suesca!